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Ébola en África: emergencia de salud pública de interés internacional

21 julio 2019
Fuente: 
Elaboración propia a partir de varias fuentes

La OMS ha declarado el pasado 17 de julio que el brote de ébola de la Rep. Dem. del Congo (RDC) iniciado en agosto de 2018 constituye una “emergencia de salud pública de interés internacional” (en inglés: Public Health Emergency of International Concern, PHEIC).

Es la cuarta reunión del Comité de Emergencias de la OMS motivada por el brote de ébola en la RDC; en las anteriores ocasiones (octubre de 2018 y abril y junio de 2019), la OMS consideró que no se daban las condiciones propuestas por el Reglamento Sanitario Internacional (RSI, tercera edición, 2016), y que la declaración de la PHEIC no habría mejorado la respuesta al brote y sin embargo habría podido empeorar las condiciones de vida de la población local al limitar el movimiento de personas por los pasos regulados y la actividad comercial de la región, lo que no evitó recibir críticas de otras organizaciones participantes en la respuesta sobre el terreno.

En junio se detectaron tres casos en Uganda, en personas procedentes de la RDC, hecho que motivó la tercera reunión del Comité de Emergencias. Ahora, la razón que ha motivado la convocatoria de la nueva reunión del Comité de Emergencias ha sido la detección de un caso de ébola en Goma, una ciudad de unos 2 millones de habitantes situada cerca de la frontera con Ruanda y puerta de comunicación de la RDC con los países vecinos y el mundo entero.

Situación del brote de ébola en la Rep. Dem. del Congo

Se trata del décimo brote en el país desde 1976, que se inició el 1 de agosto del pasado 2018. A fecha del 20 de julio de 2019 la situación es la siguiente:

  • 2578 casos (2484 confirmados y 94 probables) y 1737 fallecidos (mortalidad: 67,4 %), en las provincias de Kivu del Norte e Ituri, al noreste de la RDC.
  • De los anteriores, en 138 casos y 41 fallecidos se trataba de sanitarios.
  • 361 casos sospechosos en seguimiento.
  • 169·976 personas vacunadas (vacuna rVSV-ZEBOV).
  • En 80 puntos de control (incluyendo los pasos fronterizos) se han cribado a más de 76 millones de personas (a partir de ahora, estos puestos estarán operativos las 24 horas del día).

Implicaciones de la declaración de la “emergencia de salud pública de interés internacional”

El Comité de Emergencias de la OMS se muestra preocupado por el elevado riesgo de transmisión continuada y de extensión regional de la infección por el virus del Ébola, por lo que confirma la necesidad de intensificar la respuesta y la coordinación de los países y entidades implicadas, para minimizar y controlar dichos riesgos. También reconoce que el riesgo de extención más allá de la región, para los demás países del mundo, es bajo. 

Según la resolución de la OMS, las implicaciones de la declaración de la PHEIC son:

  • Para los países afectados: refuerzo de las actividades de información, implicación y compromiso de la sociedad civil y sus organizaciones y líderes; reforzar los controles en los puestos fronterizos y nudos de comunicación; mejorar la coordinación con la OMS y Naciones Unidas para reforzar la seguridad en torno a los equipos sanitarios; intensificar las tareas de identificación, vigilancia y seguimiento de los contactos de los enfermos confirmados y casos sospechosos; reforzar la vacunación frente al ébola según los protocolos establecidos; y aumentar las instalaciones sanitarias y reconstruir las dañadas por la violencia local.
  • Para los países vecinos: reforzar el control de los pasos fronterizos y vías de comunicación; preparar los centros sanitarios que llevarían a cabo la asistencia a casos sospechosos y enfermos; conocer los movimientos de la población y sus hábitos para predecir las vías de extensión de la enfermedad; y completar los trámites de autorización de uso de los productos y de la vacuna frente al virus del Ébola.
  • Para todos los países del mundo: ningún país debe cerrar fronteras ni restringir el movimiento de personas y mercancías con la región afectada, pues es innecesario e inútil, impondría un peaje económico injusto a la región (ya de por sí, muy deprimida y vulnerable), y empujaría a la población local hacia pasos y vías de comunicación no controlados; vigilar las prácticas de las aerolíneas para que no excedan las recomendaciones de la OMS; y se advierte de que el control de entrada en aeropuertos y puertos de otros países no está recomendado.

Impulso de la respuesta internacional para el control del ébola en la región

La declaración de la PHEIC, que se ha hecho esperar más de lo necesario según algunos expertos, ha sido aplaudida ya que probablemente contribuirá a atraer y canalizar nuevas fuentes de financiación para el refuerzo y extensión de la respuesta internacional en el terreno, y una mayor coordinación por parte de la OMS de los múltiples equipos y organizaciones participantes. No obstante, otros recuerdan que no logrará el control de la situación y la confianza de la población, mientras no se dispongan de fuertes inversiones para las infraestructuras sanitarias generales y la construcción de una atención primaria de salud eficaz (BMJ. 2019;366:l4566).

Mientras, el sarampión sigue matando niños en la Rep. Dem. del Congo

Lamentablemente, en la RDC no solo tienen que lidiar con el ébola, también con el sarampión. Un extenso brote de esta enfermedad, aún activo y que alcanza a casi todas las 25 provincias de la RDC, ha causado más de 100·000 casos y más de 2000 muertes, de las que dos de cada tres corresponden a niños, desde comienzos de año. Según Médecins sans Frontières es necesaria una urgente movilización internacional para controlar el brote. Las campañas de vacunación iniciadas se encuentran con la dificultad añadida del desplazamiento de miles de personas que huyen de las provincias del noreste azotadas por el ébola y la inseguridad. Aunque, por si fuera poco, la RDC también sufre una elevada morbimortalidad provocadas por la malaria y el cólera (BMJ. 2019;366:l4522).

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