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Quién es Robert Malone y por qué difunde información falsa sobre las vacunas de ARNm

17 diciembre 2021
Fuente: 
Elaboración propia a partir de varias fuentes

Desinformar es dar o difundir información falsa, parcial o manipulada, normalmente de forma intencionada, con objeto de engañar e inducir creencias, emociones y actitudes de la población en general o de algunos grupos en particular. Casi siempre, tras la desinformación se esconden intereses económicos o de otro tipo, no declarados.

La desinformación ha sido una constante de los personajes y movimientos antivacunas desde siempre. La vacunación de la covid no se ha librado de ello, pero ha sido iniciar la vacunación infantil esta misma semana, y se ha disparado la circulación de informaciones falsas. Los que crean y difunden desinformación aprovechan las lógicas y legítimas dudas y preocupaciones de las familias y los profesionales, y buscan crear o incrementar el miedo de todos para que rechacen la vacunación.

Una modalidad de desinformación especialmente dañina es la que difunden personajes investidos de autoridad científica o profesional, real o fraudulenta, como el caso que se expone a continuación.

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Robert W. Malone

Robert W. Malone nació en 1959 en Estados Unidos e hizo sus estudios de grado y doctorado de Medicina en universidades de California e Illinois (EE. UU.); posteriormente hizo estudios en los campos de la virología e inmunología en varias universidades estadounidenses (Wikipedia). Sus trabajos sobre el ARNm se llevaron a cabo al final de la década de 1980 y se plasmaron en dos importantes publicaciones:

Después de estos primeros y exitosos pasos, tropezó con desavenencias con otros investigadores e instituciones (como el Salk Institute for Biological Studies, en La Jolla, California), que según él mismo, se aprovecharon de sus descubrimientos tras precindir de sus servicios. Posteriormente, optó por apartarse de la investigación en este campo, y desde hace unos años dirige, junto con su pareja, una empresa dedicada a la consultoría, análisis y gestión de ensayos clínicos. Así, alejado de los focos de interés de la investigación, ha permanecido casi tres décadas, justo hasta la aparición de la pandemia causada por el SARS-CoV-2.

Tras la irrupción de la pandemia Malone ha vuelto a la primera línea y ha enfocado su interés hacia el uso de fármacos ya conocidos como famitidina, celecoxib e ivermectina, de los que mantiene que, usados de forma combinada, resultan eficaces en el tratamiento de la covid. Se queja de que todas las principales revistas científicas le han dado la espalda y rechazan, por oscuros intereses, publicar sus manuscritos (J. Mercola, dic/2021), y de que incluso la Wikipedia no se ha librado de los ataques a su figura, al eliminar comentarios que resaltaban sus líneas de trabajo y descubrimientos (Respectful Insolence, 2021).

Recientemente, poco antes del pasado verano, ha hecho acto de presencia, con mucha fuerza, en la escena pública, participando en eventos muy mediáticos, en los que ha reclamado para sí el mérito del descubrimiento de las vacunas de ARNm y aliándose para ello con oscuras figuras públicas como Bret Weinstein y Josep Mercola. Este último es un acreditado difusor de información falsa sobre ciencia (vacunas, por ej.) y otros campos de la vida social y política, desde una óptica muy conservadora (The New York Times, 6/oct de 2021). También se ha aliado con Steve Bannon, exjefe de la oficina de asesores de estrategia del expresidente estadounidense D. Trump y activista impulsor de grupos ultraconservadores en ese país. Malone ha aparecido en numerosas ocasiones con Bannon y no ha perdido estas ocasiones para difundir sus teorías (T. Fuchs, RND, oct/2021).

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¿Qué dice Robert Malone?

Malone tiene un apreciable historial de contribuciones científicas en el campo del ARNm al final de la década de 1980 (ver sus publicaciones en PubMed y su perfil en ORCID). Tras un prolongado silencio, en 2020 ha centrado su actividad en el uso de fármacos, conocidos en otras patologías, en la prevención y tratamiento de la covid. Tiene varias nuevas publicaciones en medios de segunda línea y se queja de ser víctima de una conspiración para ocultar sus nuevos “descubrimientos”. El caso es que en este 2021, Malone parece haber elegido un camino que cada vez le separa más de la comunidad científica. 

Entre sus afirmaciones están las siguientes:

  • La vacunación de la covid es una acción equiparable a la castración obligatoria o a la mutilación genital femenina.
  • A. Fauci es un títere al servicio de la industria farmacéutica. Las vacunas de ARNm no han superado las pruebas necesarias para su autorización y uso especialmente en personas jóvenes y sanas. La FDA miente al no reconocer que la vacuna de Pfizer & BioNTech aprobada es distinta a la molécula estudiada en los ensayos clínicos y que ha eximido de responsabilidad a los fabricantes (A. Fichera, sep/2021).
  • Un acuerdo secreto entre Pfizer y el gobierno de Israel oculta los “verdaderos” efectos adversos de la vacuna del primero.
  • El verdadero peligro viene de estas vacunas y no tanto de la covid. El mismo Malone dice haber pasado la enfermedad en febrero de 2020 y afirma que empeoraron sus síntomas poscovid después de recibir, casi un año después, la vacuna de Moderna, a la que atribuye el origen de la HTA y otros trastornos que sufre desde entonces.
  • Con el paso del tiempo ha ido incorporando nuevos argumentos, como la identificación de las vacunas de ARNm como parte de una conspiración de las élites mundiales que ha hecho que las vacunas hagan más virulento al virus. Y que él se encuentra entre los objetivos del gobierno de EE. UU. y de esas élites. Reconoce que, además, denunciando esto pierde todas las opciones al premio Nobel que merece.
  • El ARNm inyectado “resetea” el sistema inmunológico del vacunado, dejandole en peligro frente a los peligros externos.
  • La proteína S producida por las células tras la vacunación se distribuye por todo el cuerpo, perdura en el tiempo y tiene efectos citotóxicos directos en diveros órganos con graves consecuencias (Reuters Fact Check, jun de 2021, aquí y aquí). 
  • Los efectos adversos de estas vacunas, como la miocarditis, están causando numerosas muertes que están siendo ocultadas. Anima a los padres a rechazar la vacunación para evitar estas supuestas consecuencias.

En general, en sus declaraciones públicas, Malone no aporta datos concretos ni referencias científicas, ya que, según él, están siendo ocultados intencionadamente para que no lleguen a la opinión pública (cuenta de Malone en Twitter). A veces, en las páginas web que mantiene utiliza datos parciales extraidos de algunos estudios científicos, reales o supuestos, para apoyar sus posiciones.  

No es el único personaje embarcado en esta cruzada, otros, como la mexicana Karina Acebedo y el español Fernando López-Mirones (al cual Twitter acaba de suspender su cuenta), participan de la desinformación. Las redes sociales, con su inmensa capacidad de penetración social, son las plataformas de difusión y redifusión de las informaciones falsas. Pero los contenidos de estas no han evolucionado mucho, pues los argumentos usados no difieren mucho de los que circulan desde hace más de dos siglos (A. Kata, Vaccine, 2012). 

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Historia de las vacunas de ARNm

¿A quien puede atribuirse el mérito de la “invención” de las vacunas de ARNm? Malone se atribuye para sí mismo ese mérito, pero es realmente complicado aceptarlo sin más, pues no fueron pocos los investigadores y los centros de investigación que han hecho aportaciones sustanciales que hoy se ven como necesarias cada una de ellas. Según un medio alemán, al grupo de pioneros habría que añadir, además del propio R. Malone, nombres como Katalin Karikó, Drew Weissman, Ingmar Hoerr (cofundador de CureVac), Ugur Sahin (cofundador de BioNTech), Stephane Bancel (cofundador de Moderna) y el sueco Peter Liljeström (T. Funchs, RND, jun/2021), y sin duda otros muchos (E. Dolgin, Nature, 2021).

La verdadera historia de las vacunas de ARNm es larga y compleja, y numerosos los investigadores (con importantes equipos detrás), las empresas e instituciones implicadas que han contribuido en distintos momentos y desde distintos enfoques (E. Dolgin, 2021; X. Hou, 2021; U. Sahin, 2014; R. Verbeke, 2019). En estas referencias se pueden encontrar las siguientes figuras (hacer clic en ellas para verlas ampliadas). 

A partir de las referencias mencionadas, y como se ve en las figuras adjuntas, es sencillo deducir que el mérito del desarrollo de las vacunas de ARNm está, como la loteria en Navidad, muy repartido. Las aportaciones de Malone se limitan a las dos referencias citadas al principio (Malone RW, Proc Natl Acad Sci USA, 1989; Wolff JA, Malone RW, Science, 1990), que, en todo caso, son destacadas por numerosos investigadores como importantes.



R. Malone asegura en su propia web, que él es el “inventor original” de las vacunas de ARNm y ADN, que no es antivacunas pero que ha comprobado con gran decepción cómo el gobierno de EE. UU., la FDA, los NIH y los CDC se han puesto al servicio de la industria y han permitido la autorización de estas vacunas a pesar de no haber completado los procesos de evaluación, que se habrían llevado a cabo sin respetar exigencias éticas y metodológicas, todo lo cual justifica, según él, su activismo actual.

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Entonces, ¿por qué Malone insiste, sin pruebas, en los supuestos peligros de las vacunas de la covid?

No parece ajustado a la verdad su pretendida autoría de verdadero y principal descubridor de las vacunas de ARNm, aunque sí participó de forma destacada en investigaciones importantes sobre ello hace ya unos 30 años. La efectividad demostrada por estas vacunas frente a la covid en este 2021, y las recompensas sociales y económicas derivadas para los investigadores y las empresas e instituciones implicadas, ha hecho que Malone denuncie el olvido al que ha sido sometido y que debe estar en un lugar preponderante entre los autores del éxito (T. Bartlett, The Atlantic, 2021).

Algunos investigadores implicados en el desarrollo de las actuales vacunas de ARNm frente a la covid, como Katalin Kariko y Andrew Weinstein y otros, han sido objeto de importantes reconocimientos sociales y premios (como el Princesa de Asturias 2021, ver portada actual de Time). Sin duda estos merecidos reconocimientos tienen el peligro de personalizar de forma excesiva el mérito, aunque K. Kariko ha declarado en varias ocasiones que acepta los reconocimientos en nombre de toda la comunidad científica, a la que corresponde el mérito, y que su aportación se limitó a encontrar la forma de reducir el potencial inflamatorio y mejorar la estabilidad del ARNm en los modelos animales.

A su malestar y resentimiento por haber sido apartado por los demás colegas e instituciones (que Malone ha calificado como verdadera “violación”), suma en los últimos meses su recurso a los argumentos antivacunas de siempre, difundiendo bulos, falacias, medias verdades y grandes mentiras sobre las vacunas de ARNm. 

Circulan ampliamente estos días vídeos de R. Malone (que YouTube ya ha retirado de su plataforma) con una mezcla de bulos y mentiras que pueden hacer mucho daño a las familias que viven con cierta preocupación el inicio de la vacunación infantil. Animamos a no difundirlos y a recurrir a fuentes de información contrastados y fiables, para no contribuir a la desinformación y a sus efectos.

No son las únicas iniciativas que usan falsedades (ver imágenes adjuntas, abajo) para combatir la vacunación de los niños frente a la covid puesta en marcha por las autoridades europeas y españolas, y apoyadas por numerosas entidades científicas y profesionales, como la Asociación Española de Pediatría, en el convencimiento del favorable balance riesgo/beneficio para los propios niños vacunados y el conjunto de la comunidad en el contexto actual. 

Por favor, no comparta ni difunda informaciones falsas e interesadas como las mencionadas, anime a sus allegados a no hacerlo y busque información en fuentes fiables y en sus profesionales de referencia.

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